Cómo gestionar el Big Data, la moda de las modas en los negocios y la estrategia hacia la cual está girando la transformación digital de las empresas. Parece que últimamente nuestra empresa no es nadie si no empieza a valorar el Big Data y, a moverse en torno hacia el análisis de datos para la toma de decisiones. Por lo tanto, es evidente pensar un paso más allá y una vez aclarado que el Big Data será un eje principal de nuestra estrategia plantear los siguientes pasos.
Según la consultora IDC, para 2020 alcanzaremos los 44 zettabytes, claramente el Big Data está transformando la industria del almacenamiento de datos. A los datos generados por los usuarios llegan ahora los datos generados por las máquinas de la mano del Internet de las cosas. El clima, el tráfico, patrones de acumulación de residuos, entre otros, son datos que nuestros dispositivos empiezan a recoger y enviar a las bases de datos por lo que la primera conciencia es clara: la cantidad de datos recogidos parece ser ilimitada.
Una de las claves de la gestión puede estar en la tecnología Cloud. Esta tecnología puede ser la base para los proyectos de Big Data ya que su estrategia será determinantes para la arquitectura de las aplicaciones de gestión. Las claves de la tecnología Cloud está en su escalabilidad, flexibilidad y un coste más económico del servicio. Últimamente las empresas están girando más hacia entornos de Cloud híbrida donde el hardware y software se desarrolla in house pero todo es espacio de almacenamiento se contrata en la nube. Esto supone utilizar herramientas y aplicaciones desde conexiones a Internet para acceder a los datos desde cualquier sitio.
El siguiente punto clave debería ser la clasificación de la cantidad ingente de datos. Sobre todo es importante identificar el ruido y filtrar para destacar aquello más relevante entorno a los objetivos de negocio. Esto se conoce como Dirty Data y Clean attribution que consiste básicamente en separar el grano de la paja. Para ello la inteligencia artificial se tiene que complementar con la mano humana para dotar a las herramientas de inteligencia en torno a objetivos de negocio diferenciados.
Para optimizar esta clasificación está la siguiente clave: los algoritmos. En este caso nos encontramos con lo último en algoritmos personalizados ideados para buscar patrones y tendencias hacia la analítica predictiva. La cual permite a las empresas anticiparse antes de que los acontecimientos ocurran.
¿El futuro del Big Data dónde está? Esta es la pregunta que están tratando todos los analistas del momento pero desde Colt pondríamos el ojo en la Inteligencia Artificial y el Machine Learning que otorgará a nuestras herramientas capacidades “casi humanas” que llevarán la analítica predictiva y el toque humano a un nuevo nivel de algoritmos.